Listos para Halloween con estas galletitas de mantequilla !

Buenos días hermosuras! Como ya muchas y muchos sabéis por instagram , estoy haciendo algunas cositas para este Halloween que se aproxima. Ya veis que me atrevo con todo y entre otras cosas (cake pops, cup cakes, brownies y bizcochos) también me he atrevido con las galletas de mantequilla. La verdad pensaba que iban a ser más aparatosas de hacer y más lentas, pero nada de nada, creo que es una de las cosas más sencillas de hacer y es casi imposible que nos salgan mal…

En esta receta os voy a explicar como hacer la masa, cortarlas y hornearlas, pero no a decorarlas.
La decoración no es que sea díficil, pero si lleva unos tiempos de secado y hay que hacer glasa real en cuasi cantidades industriales jajaja (es la cobertura de color blanco a la que añadimos diferentes colorantes, para obtener todos los que necesitamos).

Con las cantidades que vamos a usar salen más de 1´5 kg de galletas, no está nada mal para empezar y además son divertidas de hacer, a los peques fijo que les vuelve locos :)


Ingredientes:

• 225 grs. de mantequilla a temperatura ambiente 

• 150 grs. de azúcar blanca normal

• 2 cucharadas de esencia de vainilla (vainhé u otra marca como los tubitos de aroma de Lidl)

• 1 huevo

• 440 grs. de harina de trigo

Materiales:

En este caso vamos a necesitarlos, para que todo sea más rápido y cómodo, y así nos queden unas galletas lo más homogéneas posible.

• Rodillo de madera o plástico 

• Papel vegetal de hornear 

• Cortadores o plantillas plastificadas

• Y si vamos a usar una batidora-amasadora, necesitaremos los dos tipos de varillas. 

El primer paso será, como siempre, precalentar el horno a unos 180 ºC. En el bol de la amasadora o en un recipiente tipo fuente que tengamos, ponemos la mantequilla A TEMPERATURA AMBIENTE (súper importante que no esté de la nevera) y la batimos un poco. 

Una vez batida, incorporamos el azúcar y el aroma de vainilla. Mezclamos bien. 

Cuando esté bien mezclado, cascamos y añadimos el huevo y volvemos a batir. Es ahora cuando vamos incorporando la harina poco a poco y siempre tamizándola con la ayuda de un colador.

Cuando hayamos incorporado la mitad de la harina, veremos que nuestra mezcla empieza a coger un aspecto como el de la foto, entones si estamos con la batidora/amasadora haremos el cambio de varillas.

Cuando ya este el 90% de la harina veremos que la masa se va trabando, entonces habrá llegado la hora de seguir a mano, mientras terminamos de incorporar la harina restante dentro del recipiente hasta que ya la masa no se peque a las manos. 

La masa no debe pegarse a las manos ya, y si lo hace basta con poner un poco de harina en la encimera (limpia!!) y darle brío con las manitas!! Vamos que es muy sencillo!!

Nuestra masa ya está lista! Ahora la envolvemos en un poco de film transparente y la dejamos en la nevera como 1 hora aproximadamente. Puede ser más tiempo o menos, no es algo preocupante.

Una vez que haya transcurrido nuestro tiempo, la cortamos por la mitad para trabajar mejor y la ponemos sobre un papel vegetal. Ahora tapamos con otro papel y tomamos nuestro rodillo para amasarla. 

En el amasado hay que dejar una placa homogénea, que no quede muy fina por unos lados y muy gruesa por otros. Si no nos vemos capaces de eso, podemos ayudarnos de dos guías en los lados y apoyar sobre éstas el rodillo. Para mi no fueron necesarias, aunque también existen unos rodillos con anillos reguladores en varios tamaños, para facilitar el grosor en el amasado. Un grosor de poco más de medio centímetro estaría bien.

Retiramos el papel de arriba una vez hecha nuestra plancha y nos ayudamos de los cortadores para hacer las formas que más nos gusten! Procuraremos pegar al máximo unos con otros para aprovechar toda la masa. Cuando estén cortados retiramos el sobrante y con él volvemos a hacer otra masa nueva.

Si queremos hacer una forma específica y no encontramos cortadores o los que hay son muy caros… podemos hacer el dibujo en una cartulina o folio grueso y plastificarla con la ayuda de un precinto o similar. Entonces cortaremos la forma con un cuchillo, delineando la figura que hayamos elegido.

También podemos darle formas con las manos, yo hice estos deditos de muerto (jajajaja) con un churro de masa. En uno de los extremos basta con oprimir un poco (donde irá la almendra tostada que será la uña) y hacer con la parte no cortante del cuchillo unas muescas a modo de falanges. 

Ponemos por tandas las galletas en la bandeja de horno, encima siempre de un papel de hornear. No debemos juntarlas demasiado ya que crecen un poquito cuando están dentro y se nos pueden pegar todas y liarla OJO!. Hornearemos a 160 ºC durante unos 10-12 minutos. 

Depende del horno estos tiempos varían, así que lo mejor es controlarlas y en cuanto los filos se doren, están listas para sacarlas a una rejilla y dejar enfriar.

Y ya tenemos listas nuestras galletitas de mantequilla :)

 En las siguientes fotos os dejo como quedan los deditos mugrientos (la almendra se une a la galleta con un poco de mermelada de fresa) y el resto de cosas.

Como última cosa, decir que para decorarlas la glasa es muy sencilla de hacer. 

Mezclamos una clara de huevo con un poco de sal y batimos con varillas hasta que se ponga espumosa. Entonces vamos añadiendo 200 grs. de azúcar glass tamizada poco a poco. Si queda muy espesa añadimos un poquito de agua y si queda muy líquida más azúcar. Tiene que quedar una textura parecida a la de la cola blanca (pegamento).

Una vez que tengamos toda la glasa, la dividimos en cuencos y vamos añadiendo a cada uno el colorante alimenticio (en Mercadona tenéis algunos de Dr. Oetker) que deseemos. Podemos hacer mezclas etc…

Cuando ya obtengamos el color que deseamos, lo podemos meter en mangas de usar y tirar o en su defecto en bolsas de bocadillo, cortamos una de las puntitas y ya tenemos nuestra manga!! Sabed también que primero se delinea y después se rellena, con el fin de no desparramar toda la glasa por la mesa (es un buen consejo, hacedme caso que yo la he liado jajaja).

Cuidado con dejar la glasa en una bolsa abierta o en un bol abandonada porque se seca. La dejaremos tapada con un pañito húmedo o en su bolsita bien cerrada. 

Con bolsitas de bocadillo nos quedarían los colores así como en la foto. No hagáis los cortes de las puntas muy grandes, es mejor hacerlo minúsculo y luego ir ampliándolo. Es mejor pecar de chico que de grande. 

Espero que os haya ayudado este post y que como siempre os digo, os animéis a hacerlas porque no os vais a arrepentir!! Nos vemos en el próximo post!

El espejo de mi Armario - Irene C.